Las calles Conde de Aranda y Juan Pablo I se convertirán mañana en zona de preferencia peatonal, restringiendo el tráfico rodado en las mismas exclusivamente a residentes que tenga que acceder a garajes, transporte público, servicio de emergencias, VMO, bicicletas, vehículos autorizados, así como carga y descarga en horario de 8 a 11 horas los días laborables.
“Se trata- señalaba la primera edil, Mari Carmen Moreno- de una medida de carácter permanente, en consonancia con una nueva forma de urbanismo que apuesta por la creación de espacios más saludables para el medioambiente y para el uso y disfrute de ciudadanos y visitantes”.
La nueva zona de uso preferentemente peatonal discurrirá desde la intersección de las calles Juan Pablo I y Floridablanca hasta el cruce de Conde de Aranda con Juan Carlos I. La actuación está incluida dentro del Plan de Movilidad Urbana Sostenible, enmarcado en la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado Águilas Sostenible y cofinanciado en un 80% por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER), a través del programa operativo plurirregional de España 2014-2020, y tiene por objetivo “hacer una ciudad más amable con el peatón y el ciclista, mejorando la movilidad en el área urbana, así como implementando de forma gradual una movilidad que reduzca las emisiones de gases de efecto invernadero”.
Esta apuesta por las zonas de preferencia peatonal supone también una medida de reactivación del comercio de proximidad. “Desde el punto de vista comercial, está demostrado que, el incremento de espacios urbanos de preferencia peatonal en los que poder pasear propicia el incremento de ventas en los comercios y servicios del entorno”, ha asegurado Moreno.
Cabe señalar que las obras para la creación de una plataforma única darán comienzo después del verano.